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Cambio climático global y cenit del petróleo

Cambio Climático Global y cenit del petróleo:
la espada de Damocles tiene dos filos
(Parte I)

Por Dale Allen Pfeiffer

Traducido por Pedro Prieto

© Copyright 2004, From The Wilderness Publications, www.fromthewilderness.com. Reservados todos los derechos. Este artículo NO se puede colocar en ningún sitio de Internet sin el expreso permiso por escrito (contactar con [email protected]). Sólo puede circularse, distribuirse o transmitirse con fines no lucrativos.

[El cenit del petróleo está viniendo en los agónicos momentos de una gigantesca transición cultural y económica. Como el síndrome de abstinencia de un adicto, los efectos de la crisis del petróleo que se avecina harán estragos en el cuerpo político estadounidense y producirán cambios tan necesarios como dolorosos en la vida de toda la comunidad humana. A medida que esta retirada inexorable se cierna sobre nosotros, iremos adquiriendo la conciencia de los daños que ha hecho esta adicción al petróleo. El cenit del petróleo es la crisis de quedarse sin él; el cambio climático es la herencia casi irreversible de dos siglos de la contaminación de los combustibles fósiles. La difícil ironía para los EE.UU. –cuyo consumo anual de petróleo empequeñece el de cualquier otro país- es que llega el día del reconocimiento en un momento en que nuestras instituciones se encuentran en los peores momentos de funcionamiento desde la guerra Civil.

La corrupción, la desigual distribución de los ingresos, el narcotráfico, el lavado de dinero, el Estado guerrero, la pérdida de libertades civiles, la situación comprometida, el racismo y el recurso constante a la violencia como una herramienta de la política nacional e internacional, todos estos achaques de la república están entrelazados. En su centro se encuentra una economía del petróleo. Ligada al militarismo por el sistema monetario del petrodólar. Si se cambia este sistema, los demás problemas son bastante más susceptibles de reformas racionales; como Catherine Austin Fitts ha dicho “hasta que no cambiemos la firma en que funciona el dinero, seguiremos siendo víctimas permanentemente en manos de las elites que no tienen interés alguno en cambiar”

El cambio climático debería ser ese incentivo perdido. La salud y las armas no son de mucha utilidad bajo siete metros de agua de mar proveniente de glaciares fundidos. Pero los embusteros hombres de Estado que se beneficiaron de cincuenta años de “Destrucción Mutua Asegurada” no se moverán , sea cual sea el peligro, mientras disfruten de un poder político y económico coercitivo. Parece que la ecuación pública es clave para tener un mundo más seguro, por lo que debemos educarnos los unos a los otros. En la primera parte de este artículo de tres partes, el editor de asuntos energéticos Dale Allen Pfeiffer hará un detallado dibujo del asunto del cambio climático y de su primordial importancia. En la segunda parte, se considerará la espantosa convergencia del cambio climático global y del cenit de la producción mundial de petróleo.- FTW]

13 de abril, 2004 0800 PST (FTW) – En octubre de 2003, el Pentágono publicó un informe sobre el abrupto cambio climático 1. Sus autores fueron Peter Schwartz, un consultor de la CIA y antiguo director de planificación del grupo royal Dutch/Shell y Dough Randall de Global Business Network, basada en California 2. Su trabajo fue asesorar sobre el posible comportamiento de un cambio climático abrupto en los próximos 20 años. Se esperaba de ellos que desarrollasen un escenario de las posibles consecuencias si el cambio climático abrupto sucediese en 2004. Finalmente, hicieron recomendaciones al presidente, basándose en su estudio: An Abrupt Climate Change Scenario and Its Implications for United States National Security (El escenario de un cambio climático abrupto; sus implicaciones para la seguridad nacional de los EE.UU.)

Se imprimieron unas cuantas copias y se hicieron circular por el Pentágono, que censuró severamente el informe y ahora está rebajando su importancia 3. Permaneció efectivamente enterrado y olvidado, hasta que unas copias se filtraron a los medios, primero a la revista Fortune 4 y después a The Observer 5. El Pentágono ha señalado adecuadamente que esto es un informe especulativo; no esperan un cambio climático abrupto para 2004. Lo que hacen Schwartz y Randall es un escenario de riesgos, como los que le Pentágono y la CIA hacen a cada momento: qué sucedería si los rusos lanzasen un ataque nuclear este año; que sucedería si California sufriese el gran terremoto, etc. Pero la importancia real del informe reside en las declaraciones de probabilidades y en las recomendaciones de los autores al presidente y al Consejo de Seguridad Nacional.

Aunque el informe no ofrece análisis estadísticos de probabilidad, según se ha publicado (cualquier estadística de ese tipo se hubiese declarado secreta), los autores establecen que “la verosimilitud de un rápido cambio climático es mayor de lo que puede aceptar la mayor parte de la comunidad científica y política” 6. Dicen que en vez de preguntarse si esto podría suceder, deberíamos preguntarnos cuándo sucederá. Y concluyen: “es bastante creíble que la evidencia de un cambio climático inminente y abrupto pueda hacerse clara y visible en esta década” 7.

De un cambio de este tipo, declara el informe, se desprenderán unas consecuencias ecológicas completamente espantosas. Europa y Norteamérica entrarían en una mini era glaciar, con patrones climáticos parecidos a los de hoy en Siberia. Violentas tormentas causarán estragos por todo el planeta. Las áreas costeras, como Holanda, Nueva York y la costa oeste de Norteamérica se harían inhabitables, mientras que la mayoría de las naciones en islas podrían quedar completamente sumergidas. Las tierras bajas, como Bangla Desh, podrían quedar permanentemente anegadas. Mientras, las inundaciones serían la regla en todas las costas, unas gigantescas sequías podrían destruir los graneros del mundo. El polvo podría retornar al medio oeste americano. El hambre y las sequías podrían provocar una disminución sustancial de la capacidad del planeta para mantener a la población actual. El acceso al agua se convertiría en una batalla generalizada; cientos de millones podrían morir, como resultado del hambre y las guerras por los recursos. Mas de 400 millones de personas en las regiones subtropicales quedarían en grave riesgo. Habría migraciones masivas de refugiados por causas climáticas, particularmente al sur de Europa y a Norteamérica. La proliferación de armas nucleares, junto con las guerras de recursos podría muy bien conducir a guerras nucleares 8.Y nada de lo anterior tiene en cuenta los efectos del cenit de la producción mundial de petróleo y la caída por le precipicio del gas natural en los EE.UU. Nada agradable.

Al final de su informe, Schwartz y Randall avisan de que el cambio climático “debería elevarse por encima del debate científico al nivel de preocupación por la seguridad nacional de los EE.UU.” 9.Y aunque “los combustibles alternativos, los controles de emisiones de gases de efecto invernadero y los esfuerzos de conservación sean tareas que merezcan la pena”, tenemos que apresurarnos a “prepararnos para los inevitables efectos de un cambio climático abrupto, que probablemente llegará, independientemente de la actividad humana” 10.

Como se ha señalado, el Pentágono está quitando hierro a este informe y ha optado por no enviar las recomendaciones de estos autores a la Casa Blanca.

Sea urgente o no para la Humanidad, este informe es muy embarazoso para el presidente Bush y sus colegas de las corporaciones, que siguen tan contentos negando la realidad del cambio climático global y la validez de las abrumadores pruebas al respecto. Una falange de desinformadores patrocinados por las corporaciones, se ganan el sueldo ridiculizando el informe y investidos por un manto de autoridad científica, mientras venden sus almas intelectuales. Y los medios de comunicación han hecho su parte del trabajo, al ocultar el asunto.

Pero aparte del bien financiado mundo de Bush y de su ciencia barata de alquiler, ¿cuál es el consenso científico global sobre el cambio climático abrupto? ¿Cuánto de real tiene el cambio climático y que evidencias tenemos de él? ¿Cómo podría provocar el cambio climático una edad de hielo en miniatura en Europa y en la parte este de Norteamérica? ¿Cuáles son las diferencias entre el “cambio climático acelerado”, el “cambio climático abrupto” y el “cambio climático fuera de control”? ¿Y cómo afectarán el cenit del petróleo y la aguda caída de la producción de gas norteamericano al cambio climático global? Este artículo trata de estas cuestiones, con algunos sorprendentes resultados.

El calentamiento global es una realidad

En 2001, al menos dieciséis grandes academias de ciencias de todo el mundo, publicaron una declaración que dice, entre otras cosas:

El trabajo del Panel Intergubernamental Sobre el Cambio Climático (en inglés Intergovernmental Panel on Climate Change –IPCC- ) representa el consenso de la comunidad científica internacional sobre la ciencia del cambio climático. Reconocemos al IPCC como la fuente de información más fiable sobre el cambio climático y sus causas y suscribimos su método para alcanzar el consenso. A pesar del creciente consenso de la ciencia con afinando sus predicciones sobre el cambio climático global, recientemente se han expresado dudas sobre la necesidad de mitigar los riesgos que representa el cambio climático. Consideramos que esas dudas no están justificadas.

…apoyamos las conclusiones de IPCC de que existe una probabilidad de cómo mínimo un 90% de que las temperaturas seguirán subiendo, esperando que la temperatura global promedio aumente para el 2100 entre 1,4 y 5,8 grados centígrados respecto de los niveles de 1990.

Ahora resulta evidente que las actividades humanas están contribuyendo adversamente al cambio climático global. Los negocios habituales ya no pueden seguir siendo igual. …urgimos a todo el mundo, a las personas a los hombres de negocios y a los gobiernos a tomar acciones inmediatas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. El resultado de la evidencia científica exige ahora pasos efectivos para evitar cambios dañinos para el clima de la tierra 11.

En su declaración, las academias científicas se refieren a un informe en cuatro volúmenes publicado por el IPCC en 2001, titulado Cambio Climático 2001. El primer volumen trata edl caso científico, un gigantesco, multifacético y multidisciplinario edificio de investigación empírica minuciosa y de argumentos que convergen en un grupo de conclusiones comunes. Por ejemplo:

A escala mundial, es muy probable que los años 90 hayan sido la década más calurosa y 1998 el año más caluroso según los instrumentos, desde 1861 (ver figura 1ª)

Nuevos análisis de datos autorizados del hemisferio norte, indican que el aumento de temperatura en el siglo XX va a ser el mayor de culquiera de los siglos en los últimos mil años..

Los datos de satélite muestran que es muy probable que haya habido una disminución de alrededor de un 10% de la extensión cubierta por la nieve desde los años 60 y las observaciones terrestres muestran que es muy probable que haya habido una reducción de unas dos semanas en la duración de la capa de hielo de lagos y ríos en latitudes medias y altas de hemisferio norte, a lo largo de siglo XX.

Ha habido un retroceso generalizado de los glaciares de montaña en reginoes no polares, a lo largo del siglo XX.

Las extensiones de hielo de primavera y verano del hemisferio norte han disminuido entre un 10 y un 15% desde los años 50. Es posible que haya habido una disminución de alrededor de un 40% en el grosor del hielo de mar Ártico entre finales del verano y comienzos del otoño en las últimas décadas y un declive considerablemente más lento en el grosor del hielo marino en invierno 12.

Variaciones de la temperatura superficial de la Tierra en los últimos 140 años y en el último milenio. Tomado de Climate Change 2001.

Hielo del Mar Ártico 1979 —Hielo del Mar Ártico 2003

Tomado de Recent Warming of the Arctic May Affect Worldwide Weather. NASA, 10/23/2003.

Uno de los descubrimientos más dramáticos del informe se refiere al hundimiento de lo que han sido las plataformas de hielo del círculo polar Ártico. Los estudios de satélites llevados a cabo por la NASA han mostrado recientemente que el hielo perpetuo del Ártico ha estado disminuyendo a un ritno promedio de un 9% por década 14.Las fotos anteriores de satélites demuestran lo dramático que es este retroceso. Pero sus implicaciones van mucho más allá de la transformación del paisaje norte mundial. La inexorable fusión del hielo marino podría distorsionar las corrientes oceánicas, que ayudan a regular y moderar el clima global, lo que lleva a un cambio climático abrupto. Esas corrientes son absolutamente cruciales para el funcionamiento familiar de la biosfera y de todos los ecosistemas, incluyendo a la agricultura. Pero un gran cambio de las corrientes de convección de los océanos del mundo (de los que la corriente de Golfo es la mas famosa) harían de la Tierra un mundo muy diferente al que la civilización se ha adaptado. Este será el tema del artículo siguiente.

La decreciente capa de nieve y hielo lleva a un mayor calentamiento de la superficie de la tierra. Así como los objetos negros absorben la energía electromagnética, la nieve y el hielo blancos en los polos son un reflector excelente, por lo que la luz y el calor del sol rebotan en la superficie de nuestro planeta y vuelven al espacio (un efecto conocido como albedo). Al fundir la nieve y el hielo polar, el calentamiento global, el albedo de la Tierra disminuye, lo que permite que la Tierra absorba y retenga más energía. Esto, a su vez, puede llevar a un descenso de la capa de nieve y hielo, que termina siendo una realimentación positiva que aumenta incesantemente el calentamiento global.

Volviendo al informe del IPCC, otras observaciones de importancia son el aumento del nivel promedio de los mares en el siglo XX y el del calor promedio mundial que contienen los océanos desde los años 50. La lluvia promedio ha disminuido en las latitudes media y alta de hemisferio norte, durante el siglo XX, al mismo tiempo que parece aumentar sobre las masas terrestres ecuatoriales. Las latitudes medias y altas del hemisferio norte han visto aumentar alteraciones del clima, así como un aumento de la cubierta de nubes. Ha habido una reducción de la frecuencia de las temperaturas extremadamente bajas y un menor aumento en la frecuencia de las temperaturas extremadamente elevadas. Episodios como el de El Niño o fenómenos como la Oscilación del Sur se están haciendo más frecuentes, más persistentes y más intensos. Y en algunas regiones, particularmente en África y Asia, la frecuencia e intensidad de las sequías 15.

El IPCC trata de cuantificar los efectos inducidos por el hombre sobre el cambio climático. Señala que la concentración de dióxido de carbono en la atmósfera, ha aumentado en un 31% desde 1750. El informe dice que el 75% de dióxido de carbono antropogénico (inducido por el hombre) de los últimos 50 años, es debido al quemado de los combustibles fósiles, y gran parte del restante debido al cambio de uso de la tierra y a la deforestación.

Los registros antiguos de cambios pasados en la composición atmosférica, proporcionan el contexto de la influencia de las emisiones antropogénicas.

(a) Muestra los cambios en las concentraciones de dióxido de carbono en la atmósfera (CO2) metano (CH4) o óxido notroso (N20), en los últimos 1000 años. El núcleo de hielo y los datos registrados en varios sitios de la Antártida y Groenlandia (que se muestran con símbolos diferentes) se suplementan con datos de muestras atmosféricas tomadas directamente en las últimas décadas (que se muestran por la línea del CO2 e incorporadas en la curva que representa el promedio mundial de CH4). La radiación positiva estimada forzando al sistema climático con estos gases está indicada en la escala de la derecha. Puesto que estos gases tienen vidas de una década o más, están muy mezclados y sus concentraciones reflejan las emisiones de las fuente en todo el mundo. Los tres registros muestran los efectos del gran crecimiento de las emisiones antropogénicas de la Era Industrial.

(b) Ilustra la influencia de las emisiones industriales sobre las concentraciones atmosféricas de sulfatos, que fuerzan una radiación negativa. Lo que se muestra es la historia a través del tiempo de las concentraciones de sulfatos, no en la atmósfera, sino en los núcleos de hielo de Groenlandia (mostrados por líneas; de las cuales se han quitado las relacionadas con los efectos volcánicos). Estos datos indican la deposición local de aerosoles de sulfatos en el lugar, reflejando las emisiones de dióxido de azufre (SO2) en latitudes medias del hemisferio norte. Estos datos, aunque son más regionales que los de la mezcla global de los gases de efecto invernadero, demuestran el gran crecimiento de las emisiones de SO2 antropogénico durante la Era Industrial. Los signos más indican las emisiones importantes de SO2 estimado (escala de la derecha)

[Basado en (a) Cápitulo 33, Figura 3.2b (CO2); Capitulo 4, Figura 4.1a y b (CH4) y Capítulo 4, Figura 4.2 (N2O) y (b) Capítulo 5, Figura 5.4a]

Gráficos y título tomado de Climate Change 2001.

Para entender la ciencia del cambio climático, hay que aprender unos cuantos términos claves. El forzamiento radiativo es una medida de la influencia que un factor tiene para alterar el equilibrio de la energía entrante y saliente en el sistema Tierra-atmósfera 16.. Es un índice de la importancia del factor como un mecanismo de mecanismo de cambio potencial del clima. Se expresa en vatios (una unidad de potencia, o energía por segundo), por metro cuadrado (una unidad de superficie sobre la Tierra): w/m2. Según Climate Change 2001, el forzamiento radiativo debido a los aumentos de los gases de efecto invernadero de 1750 a 2000 se estima en 2,43 w/m2 en conjunto: 1,46 w/m2 por el dióxido de carbono y 0,48 w/m2 del metano, 0,34 w/m2 de los halocarburos (gases cloro-fluor-carbonados y similares) y 0,15 w/m2 de óxidos nitrosos. La media total de forzamiento radiativo se espera que aumente aún más este siglo, incluso aunque las emisiones de gases de efecto invernadero disminuyesen, debido a la vida de los gases actualmente en la atmósfera.

El informe señala que nuevas y poderosas pruebas han dejado claro que la mayoría de los calentamientos observados en los últimos 50 años son atribuibles a las actividades humanas. Se considera que los registros de los núcleos de hielo de Islandia y la Antártida han vinculado el calentamiento global a razones industriales. Esos núcleos de hielo nos proporcionan registros climáticos con mil años de antigüedad. Junto con los modelos más modernos y fiables de variabilidad climática, los registros ampliados del clima indican que la tendencia actual del calentamiento no es habitual y es poco probable que tenga un origen natural. Los modelos mejorados de respuesta climática al forzamiento natural y antropogénico, encuentran pruebas consistentes de una firma antropogénica, en el clima de los últimos 50 años

Contrariamente a la ciencia que políticamente suele preferir la Casa Blanca y los directivos del petróleo que viven allí, la simulación de las respuestas climáticas a los forzamientos naturales solamente –las variaciones de la irradiación solar y de las erupciones volcánicas-, no explican el calentamiento de la segunda mitad del siglo XX. Los forzamientos naturales son un factor contributivo, pero la generación actual de los modelos por ordenador puede corregirlos ahora de manera efectiva (en otras palabras, los nuevos modelos tienen en cuenta las incertidumbres en las magnitudes de las respuestas modeladas a los forzamientos externos debidos a la incertidumbre en la sensibilidad climática). Los modelos van siendo lo suficientemente sofisticados como para simular las observaciones climáticas hechas en los últimos 140 años. Esos modelos demuestran que la tasa y la magnitud estimada del calentamiento debido al incremento de los gases de efecto invernadero por sí solos son suficientes para provocar el calentamiento observado 17.

Aparte del informe del IPCC, podemos encontrar ahora muchas pruebas de instituciones científicas de todo el mundo que apoyan el cambio climático global. Las estaciones y los patrones del tiempo están cambiando; los glaciares se están retirando; las capas del hielo continental de la Antártida comienzan a romperse; el permafrost de las latitudes superiores de Norteamérica y Siberia se derrite; el pueblo Inuit del lejano norte ven sus formas de vida tradicionales en peligro por unos inviernos que se acortan y los flujos de hielo que se rompen antes; las islas de Polinesia y de otros lugares se van quedando sumergidas por los niveles de agua en aumento; la flora de la tundra está en recesión y la flora y fauna subtropical migran hacia latitudes más templadas.

En diciembre de 2003, la Organización Mundial de la Salud anunció que le calentamiento global está matando a unas 150.000 personas al año 18. El calentamiento global está contribuyendo al incremento de la malaria y demás enfermedades con origen en los insectos, la malnutrición y las enfermedades relacionadas con la contaminación y los sucesos provocados por las condiciones climáticas extremas, tales como la mortal ola de calor de verano de 2003 en Europa. Una reciente edición de la revista Nature contenía un informe, firmado por muchos científicos prominentes, que advertían que hasta un cuarto de las especies animales del planeta quedarán amenazadas de extinción en los próximos 50 años, debido al cambio climático global 19.

El coste económico ya es considerable; el cambio climático global está costando a la economía mundial miles de millones de dólares anuales. Naciones Unidas estima este coste en más de 60.000 millones de dólares, sólo en 2003, un año en el que el cambio climático indujo desastres como la ola de calor asesina en Europa y las inundaciones masivas en China 20.Y un grupo de aseguradores liderados por Munich Re ha informado a las Naciones Unidas que el cambio climático global costaría al mundo más de 300.000 millones de dólares para el año 2050 21.

Mientras tanto, un informe publicado por el Consejo Asesor Alemán sobre el Cambio Climático, ha declarado que las medidas para frenar las emisiones de gases de efecto invernadero tienen que ser al menos cuatro veces mayores que las del Protocolo de Kioto, si se trata de evitar que las capas de hielo polares se fundan 22. El Consejo advierte que solo queda margen para otros 1,4 ºC de calentamiento global antes de que los cambios climáticos peligrosos se hagan probables. La temperatura global media ya ha crecido 0,6 ºC desde el comienzo de la era industrial, lo que pone el límite de peligro en un aumento global de 2 ºC, que el Consejo advierte se superarán en este siglo si no ponemos en marcha políticas muy exigentes de protección climática. Aunque el Protocolo de Kioto no es suficiente para prevenir el desastre, sería un primer paso.

Aunque el Protocolo de Kioto aparece ahora muerto sobre el agua. Los rusos han seguido la decisión estadounidense de salirse del Protocolo, porque creen que sus medidas dañarían el crecimiento económico 23. Entre la cultura estadounidense de la adicción a los combustibles fósiles y la captura de Congreso por el dinero corporativo, Kioto no tuvo ninguna oportunidad en el Senado de los EE.UU. Así que, por el momento, la batalla para frenar y revertir esas desastrosas tendencias climáticas, tiene que proceder desde dentro del conjunto de nuestro insensato sistema económico global.

Por tanto, los riesgos son mucho mayores que los que incluso las fuentes aquí citadas nos han indicado, como se verá cuando tratemos de las posibilidades de un cambio climático abrupto y descontrolado y cuando veamos como el cenit (de la producción) del petróleo mundial y de la estrepitosa caída del gas natural norteamericano pueden afectar al cambio climático global.

Notas

1 An Abrupt Climate Change Scenario and Its Implications for United States National Security, Schwartz, Peter, and Randall, Doug. October, 2003.

2 Now the Pentagon tells Bush: climate change will destroy us, Townsend, Mark, and Harris, Paul. The Observer, 2/22/2004.

3 Pentagon downplays report on climate change that it commissioned,AFP, 2/24/2004.

4 Climate Collapse; The Pentagon's Weather Nightmare, Stipp, David. Fortune Magazine, 1/26/2004.

5 Op. Cit. Ver nota 2.

6 Op. Cit. Ver nota 1.

7 Ibid.

8 Ibid.

9 Ibid.

10 Ibid.

11 The Science of Climate Change. 5/17/2001.

12 Climate Change 2001, The Intergovernmental Panel on Climate Change. Cambridge University Press, 2001.

13 Ibid

14 Recent Warming of the Arctic May Affect Worldwide Climate, Goddard Space Flight Center. NASA, 10/23/2003.

15 Op. Cit.

16 “Radiative forcing is defined as a change in average net radiation at the boundary between troposphere and stratosphere (known as the tropopause). A positive radiative forcing tends on average to warm the surface; there is a net heat flow from troposphere to stratosphere. A negative forcing on average tends to cool the surface; there is a net heat flow from stratosphere to troposphere.” See ‘Alternatives to Traditional Transportation Fuels 1994, Volume 2, Greenhouse Gas Emissions; Appendix A, The Chemistry and Physics of Global Warming: An Overview.'

17 Ibid.

18 Global warming kills 150,000 people a year, warms UN, Kirby, Terry. The Independent, 12/12/2003.

19 Extinction Risk from Climate Change, Thomas, Chris D., et al. Nature, Vol. 427, 1/8/2004.

20 Climate change ‘cost $60b' in 2003, CNN, 12/11/2003.

21 Impact of climate change to cost the world $US 300 billion a year, United Nations Environmental Programme, 2/3/2004.

22 Climate Protection Strategies for the 21 st Century; Kyoto and Beyond,German Advisory Council on Global Change. WBGU, 2003.

23 Russia: Kyoto pact harms economy, Reuters. CNN, 12/2/2003.

Última Edición: Miércoles, 19 Febrero 2014 @ 17:43 CET| Hits: 22.676 Ver la versión para imprimir