Los gobiernos firman su bancarrota
- Miércoles, 15 Octubre 2008 @ 01:18 CEST
- Autor: jarp
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Los acuerdos tomados por los gobiernos en los últimos días y que se resumen en inyectar dinero público a la banca pueden convertirse en la sentencia de muerte de estos. Aunque la economía mejore a corto plazo no tardaremos mucho en sufrir una "segunda" crisis económica, la cual hará quebrar nuevamente a los bancos y a sus nuevos avalistas: los gobiernos.
Si las medidas tomadas por los gobiernos tienen efecto positivo sobre la economía, como parece ser, está sufrirá una recuperación que tranquilizará a la sociedad. Nada más lejos de la realidad, pues la reactivación de la economía mundial aumentará la demanda de petróleo y el precio de este volverá a ponerse por las nubes, dado que parece haberse alcanzado el temido “peak oil”, arrastrando a su vez los precios de todos los bienes, de forma similar a lo ocurrido hace unos meses.
Esta subida de precios hará caer nuevamente el consumo, además de aumentar la morosidad, lo cual significará un segundo gran golpe para la maltrecha economía, con el agravamiento de que esta vez los bancos en quiebra serán los GOBIERNOS!!!
Todo hace indicar que de momento se sigue ocultando y negando el “peak oil”, y se tratan los distintos síntomas de este como si fueran problemas diferentes y no relacionados entre sí. Tanto es así, que incluso ya se oye a políticos decir que ahora tenemos una nueva crisis: la crisis en el empleo, como si no fuera una consecuencia del mismo problema. A esto también ayudan los medios de comunicación, los cuales parecen ser bastante cortos de vista y de memoria, ya que solo hablan de lo que tienen delante de sus ojos cada día, sin relacionar los acontecimientos. Esta crisis en general es de tal dimensión que es necesario pararse a observar desde cierta distancia, todo en conjunto, y entonces empezarán a encajar las piezas.
Cuanto más tiempo sigamos con medidas analgésicas y no curemos la raíz de la enfermedad, menos tiempo y dinero tendremos para afrontar el verdadero problema: LA CRISIS ENERGÉTICA. Es mejor pasarlo muy mal ahora que catastróficamente mal en un futuro cercano.
Por desgracia, de momento parece que se va a continuar intentando mantener el fracasado sistema actual a toda costa, hasta que este ya no aguante más y caiga por su propio peso, después de que nos haya exprimido a todos hasta el último céntimo.
Si las medidas tomadas por los gobiernos tienen efecto positivo sobre la economía, como parece ser, está sufrirá una recuperación que tranquilizará a la sociedad. Nada más lejos de la realidad, pues la reactivación de la economía mundial aumentará la demanda de petróleo y el precio de este volverá a ponerse por las nubes, dado que parece haberse alcanzado el temido “peak oil”, arrastrando a su vez los precios de todos los bienes, de forma similar a lo ocurrido hace unos meses.
Esta subida de precios hará caer nuevamente el consumo, además de aumentar la morosidad, lo cual significará un segundo gran golpe para la maltrecha economía, con el agravamiento de que esta vez los bancos en quiebra serán los GOBIERNOS!!!
Todo hace indicar que de momento se sigue ocultando y negando el “peak oil”, y se tratan los distintos síntomas de este como si fueran problemas diferentes y no relacionados entre sí. Tanto es así, que incluso ya se oye a políticos decir que ahora tenemos una nueva crisis: la crisis en el empleo, como si no fuera una consecuencia del mismo problema. A esto también ayudan los medios de comunicación, los cuales parecen ser bastante cortos de vista y de memoria, ya que solo hablan de lo que tienen delante de sus ojos cada día, sin relacionar los acontecimientos. Esta crisis en general es de tal dimensión que es necesario pararse a observar desde cierta distancia, todo en conjunto, y entonces empezarán a encajar las piezas.
Cuanto más tiempo sigamos con medidas analgésicas y no curemos la raíz de la enfermedad, menos tiempo y dinero tendremos para afrontar el verdadero problema: LA CRISIS ENERGÉTICA. Es mejor pasarlo muy mal ahora que catastróficamente mal en un futuro cercano.
Por desgracia, de momento parece que se va a continuar intentando mantener el fracasado sistema actual a toda costa, hasta que este ya no aguante más y caiga por su propio peso, después de que nos haya exprimido a todos hasta el último céntimo.