La banca advierte a Industria de una ola de ejecuciones por el recorte a las renovables
- Viernes, 18 Junio 2010 @ 12:35 CEST
- Autor: Amon_Ra
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El seguimiento de la saga de las renovables nos lleva hoy a este nuevo artículo, con un escandaloso título que confirma lo que anteriormente vaticiné cuando comentando anteriores noticias encontraba paralelismos con la burbuja inmobiliaria.
Tristemente, se ha querido llevar una revolución energética desde las alturas financieras hasta las bases del consumo, pero con una vision continuista de la sociedad industrial y de consumo. Con un planteamiento en origen con un petróleo y una economía en crecimiento esto era aparentemente posible. Pero esto se ha torcido y también la base sobre lo que se sustentaba la capacidad adquisitiva del consumidor en epocas de crecimiento. Y a esto se le añaden deudas acumuladas en el déficit tarifario, arrastrando más necesidades de amortización de capital de dichas inversiones, más intereses del plan de energías renovables. El resultado es que está reventando todo como revento en su día la situación del mileurista que se embarcó en un zulo a precios de burbuja.
Inevitablemente, al ser una estrategía continuista no estaba fundada en la máxima ya viejísima de que la mejor energía es la que no se usa.
¿Y cómo se come esto en una sociedad basada en el consumo desmedido de recursos?
Cambiamos los medios de producción eléctricos pero seguimos con los consumos anteriores? ¿Cambiaron mucho acaso los consumos de los seguidores de la web acaso? Podría servir de concienciado ejemplo, el resto pueden imaginárselo.
No salen los números. Bancos y cajas de ahorro temen las terribles consecuencias que pueda suponer la medida que el Ministerio de Industria prepara sobre el recorte de primas (sobre un 30%) a las energías renovables. Esta situación de incertidumbre ha hecho que durante estos días, algunas de las entidades con mayor exposición a este riesgo, sobre todo a la industria fotovoltaica, estén considerando la conveniencia de unificar criterios para hacer mayor presión ante los interlocutores del Gobierno.
“No podemos obviar que hay un componente político muy relevante”, explica de manera lacónica el directivo de una caja española. “Sin el visto bueno de los máximos responsables, nosotros no podemos hacer más que proyecciones del impacto que tendrá el recorte en los proyectos que financiamos. Y te aseguro que no salen los números”.
La preocupación de bancos y cajas se centra en el recorte de las garantías (prima y horas de producción) con carácter retroactivo que pueda implicar el nuevo marco regulatorio. En el caso de que las rebajas sean en torno al 30%, como se ha trasladado a las patronales esta semana, la rentabilidad esperada por el inversor “desaparece por completo. No afectaría a la deuda, pero si al capital de los promotores fotovoltaicos, por ejemplo, que no trabajarán para los bancos sin la certeza de obtener ningún beneficio”.
En la mayoría de las proyecciones realizadas, los bancos y cajas ven ya en su balance otro activo no financiero. Primero fueron los pisos y suelos, tras el estallido de la burbuja inmobiliaria, y ahora serán sobre todo los huertos solares, la energía renovable de moda gracias al régimen especial de tarifas que impulsó el Real Decreto 661/2007. “