¿Es posible crecer sin destruir el planeta? Esta es la pregunta prohibida en las cumbres del G-20 y el G-7. Es un tema tabú que el diario "La Vanguardia" aborda hoy en su sección "Tendencias". En un extenso artículo a doble página titulado "
El tabú de la recuperación económica[*1] ", Andy Robinson, habitual articulista sobre estos temas, delata las incongruencias que desde las cumbres del G-20 en Pittsburg y del G-7 en Turquía, salpican las soluciones de una posible recuperación económica que, al parecer, va a suponer la vuelta a la "normalidad", es decir, al consumo como motor de crecimiento contínuo sin interrogarse sobre la conveniencia de un cambio de modelo que afronte los grandes problemas que ya están a las puertas. Robinson nos obsequia con la alusión a las alternativas que se van abriendo camino frente a la opinión meramente economicista, mientras se advierte cierta cautela hacia la visión optimista del llamado "keynesianismo verde".
Lejos de debatir estrategias para moderar el crecimiento económico y el consumo como precondiciones para la reducción de emisiones de CO , el director gerente del FMI, Dominique Strauss Kahn, repitió las consignas pro crecimiento del G-20 de Pittsburgh: recuperar cuanto antes la senda del crecimiento a escala mundial; y fomentar el consumo en países de cultura ahorrativa, como China, Japón o Alemania. "Habrá que quitarles a los chinos el miedo a consumir", dijo un director del fondo.
Pero - según los bioeconomistas y otros pioneros de las nuevas teorías del decrecimiento escondidos en los foros alternativos de Estambul y Pittsburgh - existe un serio problema con esta visión optimista del "keynesianismo verde". No hay un escenario factible en el que la vuelta a las tasas de crecimiento registradas en las últimas décadas sea compatible con el futuro de un planeta perdurable.
Notas del artículo:
Nuevas corrientes: El acrecimiento (ver último libro de Serge Latouche), aunque minoritario, despierta cada vez más interés.
La emisiones de CO2 y su relación con el PIB:
- ¿Buena noticia?
Las emisiones de CO2 caerán este año un 3% pero sólo por la recesión económica y el paro.
- Kioto, ¿qué Kioto?
1990 es el año base de Kioto, pero las emisiones de CO2 han subido un 40% desde entonces.
- Un logro muy relativo:
Las emisiones de CO2 por cada aumento de PIB han bajado el 33% desde 1970. Pero en términos absolutos han crecido el 80%.