Contributed by: Redacción CE on Miércoles, 15 Abril 2009 @ 12:11 CEST
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El actual modo de funcionamiento del sistema productivo, desde su mismo origen, fue altamente despilfarrador. Partía de una base errónea, ya que suponía que la cantidad de recursos de los que podía disponer era ilimitada. De todos los recursos, desde el petróleo hasta el uranio, desde el cobre hasta el agua. Por consiguiente, el modo de producción puesto en funcionamiento por nuestro sistema no se paraba a pensar en la eficiencia en el uso de tales recursos. En todo caso, la preocupación era, tan solo, cómo obtener los recursos precisos al más bajo precio posible. Y debido a que durante muchos años el precio de las commodities fue muy reducido, la eficiencia en el uso de los recursos continuó brillando por su ausencia.El economista ha publicado recientemente un libro, titulado "El crash del 2010. Toda la verdad sobre la crisis[*2] ", donde explica que nos encontramos aún en época de "pre-crisis", y que el mundo se enfrenta a una crisis sistémica de la cual sólo se saldrá a base de "productividad y eficiencia", lo que dará paso a que la "economía vaya adoptando el rol de ciencia que se ocupe de la mejor forma de administrar unos recursos que ya son escasos y que crecientemente más lo serán".