En una noticia aparecida el 12 de julio en el
Times[*1] se informa respecto a la prohibición del modo stand-by en el Reino Unido:
El gobierno va a ilegalizar el modo stand-by en televisores, vídeos y reproductores de DVD para reducir la cantidad de electricidad malgastada en los hogares. Los refrigeradores, lavadoras y lavaplatos deberán ser eficientes energéticamente, las bombillas que gasten demasiada energía serán retiradas. Conforme al Resumen de Energía de ayer los equipos en stand-by consumen el 8% de toda la energía eléctrica consumida en los hogares.
Pero la noticia tiene otros datos de interés:
El Gobierno tiene gran interés en reforzar el Sistema de Comercio de Emisiones Europeo, expandiéndolo para que incluya áreas de negocio como bancos y cadenas de supermercados. Este movimiento podría conllevar a que más sectores se enfrentasen a un recorte en sus emisiones contaminantes. Las carreteras y la aviación también entrarán en este sistema de cuotas si el Gobierno puede convencer al resto de países Europeos para que apliquen estas mismas normas. En la
BBC [*2] está la misma noticia pero con indicadores de la cantidad de emisiones y despilfarro de los electrodomésticos en stand-by.
Aunque el resto pueda considerarse como un wishful-thinking no deja lugar a duda de que el problema ya está aquí y que las primeras medidas ya están en camino, y serios deben ser los síntomas cuando un Gobierno pretende aplicar unas medidas (por poco efectivas que puedan parecer) que a buen seguro resultarán impopulares.