Por segunda vez en lo que llevamos de año Europa vuelve a sufrir bajadas de presión en el suministro de gas natural ruso, por la ola de frió polar que esta soportando Rusia estos días. Después de sufrir por el conflicto entre Ucrania y Rusia por el precio del gas cortes o disminuciones de presión en el suministro de gas natural, la gran demanda rusa para poder combatir las temperaturas de -40º que se están produciendo están también provocando problemas en la extracción y trasporte de crudo, así como problemas con la electricidad. La gran dependencia de Europa de dichos suministros hace que muchos países se vean afectados sin soluciones fáciles, de prolongarse la situación mucho tiempo.
Más información en El País.