Contributed by: Redacción CE on Martes, 03 Enero 2006 @ 18:37 CET
Last modified on
Se ha declarado la primera guerra del SXXI. Un país corta el suministro energético de otro porque no se pliega a sus exigencias. Rusia, el primer productor mundial de gas, acaba de apretar el botón del arma energética. En pleno invierno, Vladimir Putin ha cerrado la llave de paso que permite a 50 millones de ucranianos calentarse y hacer funcionar su economía.Sin embargo, Jerome a Paris, desde European Tribune, no lo ve de una manera tan dramática. Recomendamos la lectura de su artículo “Russian gas cuts - why there is no need to worry[*2] ”, un polémico retrato del comercio de gas entre Turkmenistán y Ucrania, en realidad también en manos de Gazprom y que para Jerome a Paris resulta ser la clave para entender esta crisis.
Con el acelerado desarrollo mundial y la emergencia de gigantes consumidores como China e India, las materias primas se han convertido en armas de disuasión, si no de destrucción económica masiva.