¡Lo logramos!

 Las siete mayores economías del mundo (G7) admiten que no tienen ni idea de cuánto petróleo queda. Emiten una llamada urgente en pro de la transparencia en la cumbre DC (Washington)

 Un cambio de los partidarios de la tierra plana y del petróleo abiótico y de los economistasde la abundancia – Es ahora o nunca

 Por Michael C. Ruppert

 

Traducido por Ricardo Jiménez y revisado por Patricia Terino para Crisis Energética

 

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WASHINGTON, 1 de octubre (Reuters) –Preocupados porque el aumento de los precios del petróleo pudiera dañar las mejores perspectivas mundiales de hace años, los ministros de economía de las naciones más ricas se reunieron el viernes para intentar encontrar qué hay tras este aumento y cómo proteger la expansión económica.

El grupo de los siete ministros de economía y los bancos centrales se reunieron en el fuertemente protegido edificio del Tesoro de EEUU para comer y trabajaron toda la tarde antes de cenar con su homólogo chino, quien ha aceptado cambiar el menú.

Los ministros expondrán su visión del mundo a las 5:45 de la tarde (21:45 GMT) en un único comunicado donde dijeron que incluirían una llamada a los principales supervisores del mercado del petróleo para hacer más fácilel discernimiento acerca de si la escasa oferta, la enorme demanda o la especulación del mercado están detrás de la escalada del crudo a niveles récord.

La respuesta a esta cuestión es algo de vital importancia.

Podría afectar a las respuestas políticas que pueden adoptar los grandes consumidores de petróleo –los altos tipos de interés para detener la inflación o un renovado esfuerzo para hallar nuevas fuentes de energía- y puede ofrecer una información clave sobre cuánto durará la escalada de los precios.

El viernes, los futuros del petróleo estadounidense superaron la barrera de los 50 dólares.

AUMENTO DE LOS RIESGOS

“Los altos y volátiles precios del petróleo representan un riesgo para las perspectivas, enfriando el gasto de los consumidores y los beneficios de las empresas”, advirtió el viernes el Ministro de Economía y Hacienda británico, Gordon Brown. Dijo que era vital para el G7 “mejorar la transparencia y la eficiencia del mercado petrolífero”.

Fuentes del G7 dijeron que un documento publicado el viernes por Brown, exponiendo su llamamiento para mejorar los datos del mercado energético, elaboraría la base del lenguaje sobre el petróleo en el comunicado de los ministros.

Tras la reunión formal del medio día, los ministros del G7 se sentaron con China para una cena de trabajo anunciada como una ocasión histórica para traer al gigante asiático al redil y discutir sus planes para facilitar la fijación del yuan al dólar.

El encuentro del G7 viene precedido por las reuniones del fin de semana del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.

Los ministros buscan la transparencia en el mercado energético para descubrir si las reservas mundiales de petróleo pueden ser más escasas de lo que ya pensaron en mayo cuando insistieron a los productores para que abrieran los grifos...

Otro representante del G7 sugirió que el aumento en los costes del petróleo tenía su raíz en factores tan fundamentales como las sobrestimadas reservas y no se debe sólo a la especulación.

Hay un “reconocimiento de que los recursos petrolíferos son más escasos de lo que se creyó hace unos años”, dijo el representante. “Estamos de acuerdo en que es necesaria una mayor transparencia sobre las reservas potenciales de varias áreas”.

Si la escasez es la principal culpable, la conmoción en los precios del petróleo puedeque no sea tan pasajera como se esperaba, dijo el representante. [las negritas son mías, Michael Ruppert]

“WRAPUP 1-G7 calientan el petróleo antes de la reunión con China”
Reuters, 1 de octubre de 2004

4 DE OCTUBRE DE 2004: 0800 PDT (FTW) –El petróleo ha roto la barrera de los 50 dólares por barril. Los expertos financieros tales como T. Boone Pickens dicen que veremos el petróleo a 60 dólares antes de que lo veamos de nuevo a 40 dólares (si ocurre). En el G7 y en todo el mundo desde las Filipinas hasta Brunei, a Escocia, a Nueva Zelanda, a China, a Tailandia, a Japón, a Gran Bretaña, a EEUU, muchas naciones han buscado y discutido para impedir el colapso económico, los apagones y la escasez de alimentos. Otros ya han experimentado los apagones, los cortes de energía, o se protegen ante posibles letales cortes energéticos este invierno. Los asuntos económicos pueden muy pronto ser desplazados por asuntos de simple supervivencia. La producción alimentaria de China ha estado cayendo en picado durante años y por todo el planeta se están produciendo cada vez menos alimentos, los cuales requieren diez calorías de energía procedente de los hidrocarburos por cada caloría que se ingiere.

Dos ejemplos: en Nueva Zelanda, la nueva web de noticias stuff.co.nzinformó el 1 de octubre que las reservas de petróleo del país estaban “ pendientes de un hilo”. En Filipinas, el 25 de septiembre, el Manilla Bulletin Online publicó un artículo titulado “El ministerio de la energía: el gobierno trabaja para tratar la inminente crisis”. La India ha comenzado a acumular petróleo, pagando a precios superiores a los del mercado para una “reserva estratégica de crudo” como la de EEUU.

Todo está ocurriendo con una población actual de 6.500 millones de personas,y se espera que supere los 9.000 millones a mediados de siglo.

Durante tres años (y en muchos casos durante más tiempo) un grupo de mujeres y hombres totalmente entregados a su trabajo, reconocidos como la vanguardia del movimiento para situar el cenit del petróleo en el centro de la agenda mundial, han soportado una intensa resistencia –ataques personales, “barricadas” burocráticas, desinformación, etc.- para transmitir un único mensaje: el cenit de la producción mundial de petróleo es inminente. Sus nombres son: Colin Campbell, Kjell Aleklett, Jean Laherrère, Kenneth Deffeyes, Matthew Simmons, Richard Heinberg, Julian Darley, Barrie Zwicker, Ali Samsam Bakhtiari, Michael Klare, Adam Porter, Andreas von Bülow, Richard Duncan, Walter Youngquist, Jay Hanson, Marshall Auerback, The Electric Wallpaper film company, el editor de From The Wilderness Dale Allen Pfeiffer, Stan Goff y yo (entre muchos otros).

Los recientes comunicados del G7 y otras noticias han puesto irrevocablemente al cenit del petróleo sobre la mesa. Lo fundamental es que el G7 ha admitido que la demanda ha dejadoatrás a la oferta y que debido a los engaños y al secretismo, realmente no tienen idea de cuánto petróleo queda, o cuántoestá disponible para su producción (dos cuestiones diferentes). En los próximos meses no habrá en el mundo una historia más importante. Tras eso, y como el G7 debe empezar a ofrecer explicaciones y respuestas a toda la humanidad –dejando solos a los próximamente anacrónicos mercados financieros- nosotros estaremos allí, siguiendo de cerca cada declaracióncon nuestras investigaciones. Y exigiremos respuestas honestas.

De varios modos y de forma gradual, puede surgir el pánico. Los recursos de la guerra sobre el cenit del petróleo y la escasez empezaron oficialmente el 11 de septiembre de 2001 y están proliferando ahora a través de una multitud de guerraspor el “poder” desde elSuresteAsiático hasta elCáucaso, ÁfricaOccidental (Nigeria y GuineaEcuatorial entre otros), Georgia y Chechenia.

Como FTW siempre ha insistido, el principal objetivo de estos activistas del cenit del petróleo fue llegar a este punto de admisión lo antes posible; de forma abierta, en vez de secretamente, de manera que toda la raza humana, especialmente esa mayoría no preocupada únicamentepor los libros de existencias, los beneficios,los valores del mercado o las inversiones recuperables, puedan tener una opinión en un debateque afectará con seguridad a las opciones de supervivencia de todos y, más importante, al futuro mundo de nuestros hijos e hijas.

Espero hablar en nombre de todos cuando digo que sea lo que fuera lo que hemos soportado, valió la pena.

Estábamos en lo cierto y esto no puede ignorarse por mucho más. Lo logramos. Tenemos al cenit del petróleo sobre la mesa y lo hemos hecho antes de las elecciones presidenciales estadounidenses de 2004. Ahora la siguiente cuestión es: ¿Mencionaráalguno de los candidatos esta cuestión antes de que votemos? Hacer esto comprometería instantáneamente a todo el planeta para empezar a buscar “transparentemente” en un grado u otro opciones basadas enalgo más queen consideraciones económicas y financieras. Como Collin Campbell, fundador de la Asociación para el Estudio del Cenit del Petróleo y el Gas (ASPOen inglés), escribió recientemente, “Este es el fin de la economía”.

Creo que el G7 ya tiene una buena idea decuán nefasta es la situación, y están ya discutiendo “opciones” que no quieren que el resto de nosotros conozcamos.

Para todos aquellos críticos que embistieron con que existían unas reservas abundantes de petróleo abiótico, o un petróleo producido ad infinitum desde el manto de la tierra, nosotros preguntamos, ¿dónde está? Ellos han argumentado que los activistas del cenit del petróleotitubean sobre esta cuestión según las compañías petrolíferasque buscan beneficios o para los mercadosque persiguen mayores ganancias. El G7 ha admitido que la economía mundial está amenazada hoy, no mañana. ¿Cómo beneficia eso a las compañías petrolíferas o al mercado si nadie puede comprar sus bienes y servicios, o si no hay energía con qué utilizarlos? Yaes horade que estos críticos produzcan sus vastos recursos energéticos ilimitados, ya que el G7 ha admitido que todo se está cayendo a pedazos. (Como si no lo hubiéramos anunciado). Esto es lo que estos críticos argumentaron que ocurriría cuando llegara la hora: habría algún truco mágico, se descubriría alguna nueva fuente de energía.

Los economistas tradicionales son cornucopianos: realizan cálculos como si los mercados fueran fuentes mágicas de bienes, sin límites ecológicos de ningún tipo. La escasez de petróleo no existe porque ellos la ignoran. Los partidarios del petróleo abiótico creen que éste puede crearse sin una antiquísima biomasa, y que existe en terrorífica abundancia a profundidades factibles para la extracción masiva. La escasez de petróleo no existe porque ellos la ignoran. Ambos grupos rechazan el cenit del petróleo con el riesgo que ello conlleva para la comunidad mundial, y haciendo eso protegen la desastrosamente ingenua confianza pública en este ruinoso sistema –una confianza expresada enCotizacioneslucrativas, hipotecas y futuros. Quizás estos economistas de la “tierra plana” y los partidarios del petróleo abiótico deberían cambiar sus ataques de los partidarios del cenit del petróleo a las empresas petrolíferas cuyos valores de mercado, al parecer, han estado (consciente o incoscientemente) protegiendo. Para aquellos que exponen que invirtiendo dinero en el problema se solucionará éste, ¿cuánto tiempo estáis todos –especialmente los pudientes como Daniel Yergin- planeando esperar antes de probar que estáis en lo cierto? ¿Cuántas personas han de morir en cuántas guerras y cuántos deben congelarse o perder su trabajo antes de que nos mostréis al resto de nosotros esta energía mágica o este petróleo ilimitado que nos habéis estado asegurando que existían?

Uno no puede materializar un perrito caliente en la cámara acorazada. No importa cuánto dinero haya. La tierra es una cámara acorazada y todos nosotros estamos dentro de ella.

¡ Mostradnos el petróleo! La gente está muriendo ya. El G7 lo ha hecho todo perola situación es ésta, a no ser que se halle más petróleo. Recordad que puede llevar tres años el que un nuevo yacimiento petrolífero (una vez encontrado) se ponga en funcionamiento. No nos ataquéis nunca más. Habéis dicho que hay una fácil solución. Producidla para todos nosotros, incluso para vosotros mismos. Porque no sois inmunes a lo que se avecina. Hemos intentado advertiros incluso a vosotros. Como una vez me escribió el editor de energía de FTW Dale Allen Pfeiffer, “El cenit del petróleo se defenderá a sí mismo bastante bien”.

Presentad algo o callaos.

Un simple hecho no ha cambiado. Antes de que el petróleo pueda ser producido primero ha de encontrarse. Los descubrimientos mundiales de petróleo llegaron a su cenit en 1964 y han estado declinando durante 40 años. M. Kink Hubbert predijo que la producción estadounidense de petróleo alcanzaría su cenit 40 años después de que los descubrimientos llegaran al cenit alrededor de 1930. Acertó. El año pasado no se descubrió ni siquiera un sólo yacimiento de 500 millones de barriles (por primera vez desde la década de 1920) en ningún lugar del planeta. El mundo usa un millón de barriles de petróleo cada once días y medio. Nos encontramos ahora aproximadamente a 40 años tras el cenit mundial de descubrimientos. Esta simple aritmética nunca ha cambiado. Las consecuencias tampoco lo han hecho.

China, en un desesperado intento por asegurarse petróleo, está buscando construir un oleoducto a través de Birmania hasta el océano Índico, y de ese modo evitar los cada vez más peligrosos y volátiles estrechos de Malacca y el mar de China del Sur (Asia Times, 22 de septiembre de 2004). China también se está apresurando a construir un oleoducto desde el este de Kazajstán a través de Asia Central desde el dársena del Caspio, a través de un territorio vasto y hostil, partes del cual están cercanas a las regiones ocupadas por el ejército estadounidense en Kirguistán. Los EEUU han estado rodeando militarmente a China desde el 12 de septiembre de 2001. China también está pidiendo fríamente ayuda a países como Irán, ArabiaSaudí, Venezuela, y la zona de África Occidental, ofreciendo grandes pagos por cualquier petróleo que pueda obtener. Hace más de dos años FTW predijo esto, ya que describíamos a China como “el fin del juego” del cenit del petróleo. Por favor, consulten:

http://www.fromthewilderness.com/free/ww3/092502_endgame.html.

Esto se desarrollará así incluso si como parece Rusia sólo va a construir un oleoducto en la parte oriental de Siberia y que éste servirá a Japón, Corea, Filipinas y posiblemente a Malasia, en lugar de a China. El segundo mayor importador de petróleo del mundo prevé que tendrá más coches y camiones que EEUU alrededor de 2030. Su economía todavía está creciendo cerca de un 7% anual pese a la escasez de energía y los apagones en Shangai o en cualquier otra ciudad, que han frenado la producción de las fábricas propiedad de EEUU, Japón y Corea llenas de trabajadores que no pertenecen a la empresa.Al igual quesus competidores geoestratégicos y económicos, China está desesperada por más petróleo.Esto no lo dice FTW, ¿Por qué no informas de ello, Lou Dobbs?

Como informó Straits Times el 2 de octubre de 2004:

“Es la actitud del gobierno de Myanmar. Ahora están de acuerdo en que haya conversaciones. Anteriormente, las rechazaron”, dijo el profesor Wang a los medios, sugiriendo que Beijing había puesto el oleoducto enel punto de mira.

“La necesidad de China de petróleo es enorme y urgente. Cualquier oleoducto, cualquier ruta, sería beneficiosa”.

Casi cada nación está ahora en una luchapor la energía. El 14 deseptiembre, como informó el Independent, Tullow Oil, una de las mayores compañías petrolíferas del Reino Unido, advirtió sobre apagones y escasez de calefacción este invierno. ¿Por qué? Los yacimientos del Mar del Norte se están evaporando másrápido que un par de cubitos de hielo en un día caluroso. Un artículo del mismo día del Times of London advertía de cortes energéticos este invierno, por la escasez de petróleo de calefacción. Estos acontecimientos provocaron que el Secretario de Economía y Hacienda británico, Gordon Brown, advirtiera al G7 el 1 de octubre de que los precios eran una amenaza para la “recuperación” económica mundial (Reuters). ¿No es impresionante que los financieros nunca hablen de supervivencia? Sólo hablan de crecimiento y recuperación. Eso es porque la economía y el actual paradigma financiero necesitan ir casi inmediatamente por el camino de los dinosaurios y de los tigres de dientes de sable.

Como hemos dicho desde el principio, y como yo concluyo en mi libro recién editado Crossing the Rubicon: The Decline of the American Empire at the End of the Age of Oil (Cruzando el Rubicón: La Decadencia del Imperio Estadounidense y el fin de la Era del Petróleo), no cambiaremos nada y llegaremos, de forma colectiva como especie, a un final triste y miserable aunque primero cambiemos la forma en que trabaja el dinero. Eso, y nada más, hará que haya una importante diferencia en las consecuencias.

Michael C. Ruppert

3 de octubre de 2004

[NOTA DEL EDITOR: se han solicitado ejemplares para reseñas de Crossing the Rubicon por más de 120 agencias de prensa de todo el mundo, incluyendo las mayores y más poderosas. Mientras aún no sé qué tipo de críticas recibiremos, sí sé que el mundo está prestando mucha atención a lo que he escrito. Aunque el libro aún no ha sido lanzado oficialmente, hemos irrumpido en la lista del 1% de los libros más vendidos de Amazon junto a un libro que aún no se ha publicado y nos han dicho que esto es extremadamente raro. El 3 de octubre nuestro puesto era el 180 de más de un millón de títulos. Esto es inaudito.

Actualmente, las únicas copias disponibles (enviadas desde la última semana) son las de la web de FTW. Tenemos unas 15.000 y se están agotando rápidamente. Hicimos esto porque sabíamos que teníamos que controlar tanto el marketing como el transporte de los libros. Hemos estudiado y aprendido de las lecciones que nos han dado grandes autores como Fletcher Prouty, Peter Dale Scott,y Gerard Colby. New Society Publishers ha anunciado un envío para venta al por menor (tanto en Internet como en las tiendas) el 16 de octubre. Se señalan envíos de mayor tamaño variando del 20 de octubre al 6 de noviembre (cuatro días después de las elecciones).

Este libro puede cambiar las consecuencias de las elecciones y animo a los que quieran comprender esta batalla sobre el cenit del petróleo y lo que significa para vuestras familias a adquirir una copia del libro hoy. Realmente es una información que puede salvar tu vida. –MCR]